¿Cuándo debo regalar mi ropa?

Cuando regalar tu ropa
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Sabemos que es difícil deshacerte de esos jeans que tanto éxito tuvieron cuando estabas en la universidad, o de ese vestido con el que conociste a tu esposo… en el que ya no entras. La mayoría de las mujeres coleccionamos ropa a la que nos sentimos emocionalmente apegadas.


Según una encuesta británica, en promedio las mujeres tenemos alrededor de 15 prendas que nunca usamos, juntando polvo en nuestro clóset. El hecho es que guardar los jeans de cuando teníamos 20 o los pantalones de cuando pesábamos 120 kilos no es bueno para nadie.


Por lo general es difícil desprendernos de estas prendas porque significa decir adiós a un periodo de nuestras vidas, o aceptar que nunca volveremos a tener ese peso ideal para que los skinny jeans lucieran realmente.


Otras mujeres nos aferramos a los jeans porque los vemos como una motivación para ponernos a dieta o hacer ejercicio, el típico “tengo que volver a entrar en ese vestido”. El problema es que la ropa nunca es suficiente.


El problema es que el conservar esos jeans de cuando eras talla 3 es un recordatorio constante de que ya no eres perfecta, sin importar eras talla 3 cuando tenías anemia o cuando tenías 13 años, el estarlos viendo te recuerda que ya no eres tan delgada, reflejándose inconscientemente en tu autoestima.


Apego a las tallas grandes


También está el otro lado de la moneda. Cuando perdemos peso nos rehusamos a tirar nuestros jeans gigantes por miedo a estar tentando al destino, o los mantenemos como un recordatorio del peso que nunca queremos ganar.


Para una persona que tuvo sobre peso durante toda su vida, y luego adelgaza bastante, es todo un proceso psicológico el poder deshacerse de su ropa anterior. Siempre queda el miedo de volver a subir y luego no tener nada que ponernos.


Por lo general, la gente que baja mucho de peso tiende a subirlo nuevamente porque nunca cambian su estilo de vida, no se sienten listos para dejar los viejos hábitos totalmente atrás. Guardar la ropa es como aceptar que realmente no estás hecha para ser delgada y que sabes que volverás a engordar.

 

¿Cuándo es momento de tirar la ropa?


Entonces, ¿cómo podemos saber cuándo es momento de deshacernos de todas esas prendas que sólo ocupan espacio, y recuerdos?


El clóset ideal no debería de tener nada que no nos quede. Así de simple, ¿te queda?, ¿no? Fuera. Aunque claro, hay algunas excepciones (que no tienen nada que ver con dieta o empezar a correr mañana).


Si estás embarazada, o acabas de tener un bebé, o empezaste un entrenamiento físico fuerte como un maratón, bueno, tu cuerpo va a cambiar momentáneamente, así que puedes guardar la ropa que no vas a estar usando próximamente.


Ahora, si bajaste de peso considerablemente, y te has mantenido delgada por más de un año, es momento de donar tu ropa talla 18. ¡Ya¡ Antes de que te encuentres dándote motivos para conservarla.


Limpiar el clóset de ropa que no nos queda dejará espacio para nueva ropa, para nuevos planes, para nuevas ideas de combinaciones y nuevos estilos que explorar. Deja de golpear tu autoestima cada mañana cuando sacas los jeans talla 3, si eres 7, compra unos preciosos jeans talla 7 y úsalos con orgullo. Si bajas de peso, comprarás otros, talla 3, más bonitos. 

 

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